Luciano Díaz escribe sobre Mauricio Stella

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El trabajo de Stella no es un elemento casual como aficionada autodidacta; Cada elemento es concebido, construido, destruido, transformado para sacar un nuevo orden.

Es como mirar dentro de un caleidoscopio, donde los espejos que reflejan las imágenes son nuestros pensamientos, con un sabor antiguo o a veces distante. Qué tan lejos está el sur del sur y su gente desapareció en el olvido del bosque y en la agonía de nuestra memoria.

Solo unas pocas reflexiones temblorosas en el subconsciente profundo, donde la metamorfosis y la naturaleza creada logran encontrarse con ese pensamiento arcano en la placenta del tiempo mucho antes de nacer como sombras evanescentes en las brumas de nuestros recuerdos.

Las obras de la artista Stella son de ensueño y delirantes en color.

Sus grandes lienzos que evocan un "Submundo" borracho con imágenes extrañas, presencias impactantes y criaturas febriles, nos muestran apenas su pensamiento sobre el hombre actual, el que, con sus tragedias diarias, esconde su verdadera rostro roto y atónito frente a su propio drama ... "para vivir por su parte del mundo, hay otros afuera ...".

Sus creaciones de mezclas opulentas y rasgos de gestos irreverentes nos recuerdan a los expresionistas alemanes del período de posguerra.

Pero su lenguaje muy personal va mucho más allá de las crudas denuncias sociales de estos antiguos Maestros. "Su obra representa un gesto mucho más íntimo".

Estamos ante un llamamiento poético, de violencia contenida y dulzura de recuerdos.

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Prof. Luciano Díaz - Facultad de Artes Pictóricas Universidad de Chillán (Chile)